La voluntad de elegir en Jagüey Grande

Cuando Yumi Díaz Romillo, una de las dos candidatas a diputadas a la Asamblea Nacional del Poder Popular por el municipio de Jagüey Grande enfrentó por primera vez el recorrido por centros económicos y sociales, escuelas y comunidades para conocer de primera mano las fortalezas e inquietudes de la población, me percaté de cuanta humildad y coraje reflejaba su rostro al sostener ese maravilloso intercambio con el pueblo.

Pero en su menudo cuerpo de joven jagüeyense estaban concentrados muchos años de esfuerzo y sacrificio para graduarse, primero de licenciada en Marxismo, y con posterioridad ejercer la profesión de profesora de Folosofía y Economía Política en el Centro Universitario Enrique Rodríguez Loeches, de Jagüey Grande.

Comenta la también Master en Ciencias que de convertirse en realidad esa honrosa condición de Diputada al Parlamento Cubano, el próximo 26 de marzo cuando el pueblo emita el sufragio en las urnas, eso la ayudará a crecer, a conocer otro mundo, a obtener nuevos conocimientos y a dotarla de muchas herramientas para la vida y para transmitírsela a sus estudiantes.

Y aunque a ella le asusta un poquito la idea de desempeñar tamaña responsabilidad dada su condición de haber sido elegida por primera ocasión en esta legislatura como delegada de su circunscripción, y ahora como candidata a diputada, le resultará algo difícil pero sabe muy bien que contará con el apoyo de la comunidad, de los factores del barrio, de su colectivo de trabajo, del Partido, el Gobierno y hasta de su rectora, quien también se desempeñó en ese cargo, y está convencida de poder representar a su pueblo dignamente.

Díaz Romillo manifiesta que constituye un nuevo proceso de cambios y transformaciones en su vida personal y profesional, y que si sale electa se va a probar a sí misma como profesional y como persona.