La tertulia de la matanceridad, en la Casa Social de la Unión de Escritores y Artistas (UNEAC) en la Atenas de Cuba, estuvo dedicada a dos grandes de la plástica: Emilio Mora Galán y Luis Felipe Franco Laffite, paradigmas durante más de cuatro décadas de la cultura en Jagüey Grande.
El primero, fallecido este 2 de febrero, a los 73 años, fue fundador de la Brigada XX aniversario de Instructores de Arte, con una impronta significativa en la formación de jóvenes talentos de la localidad, a su paso por las escuelas en el campo y las principales instituciones del territorio.
Vale saber que a mediados de los 80 sufrió un accidente de tránsito y perdió totalmente su brazo derecho, lo cual no le impidió trabajar la cerámica, el hierro, la madera y las semillas.
En el 2001 fue premio provincial de Cultura Comunitaria y finalista en el país; en el año 2000 obtuvo el premio nacional Olga Alonso y la distinción Raúl Gómez García, en 1997, además de mantener durante nueve años consecutivos, la condición de Vanguardia Nacional.
El segundo creador es conocido por sus esculturas, retratos y caricaturas en una colección de más de 800 personalidades y pobladores de su ciudad natal, que tipifican a Franco como uno de los más admirados artistas de su tierra, pues a ello se conjuga el ser precursor del proyecto La Tendedera, donde concurren diversas manifestaciones del arte.
Miembros de la UNEAC y de la ACAA, entre ambos destacan por sus premios nacionales, así como se recuerdan aquí por su obra escultórica realizada de conjunto, titulada “América nuestra”, esculpida en piedra de Jaimanitas, de cinco metros de alto, colocada en 1984 en la calzada de Esteban, en la barriada de La Playa.
La tertulia, dirigida por Leo Ernesto García Ramos, vicepresidente de la UNEAC, sirvió para la entrega oficial del diploma premio David 2021, a la escritora y periodista Nathaly Hernández Chávez, de manos del presidente de la institución, José Manuel Espino, Daneris Fernández, presidente de la Asociación de Escritores y Eddy Hernández Alonso, director municipal de Cultura.
Durante la jornada, la narradora oral Tania Jiménez deleitó al público asistente con la pieza “La niña dormida” y las escritoras Cecilia Soto y Olga Martínez leyeron versos inspirados en el amor, la ciudad y Carilda.
Asimismo, el promotor Vladimir Pérez, del Centro provincial de Cine comentó la presencia de nuestro Héroe Nacional en el séptimo arte cubano, con la más reciente obra ”Martí, el ojo del canario”, de Fernando Pérez.
Por su parte, el director de Ediciones Aldabón, Daniel Cruz Bermúdez, ofreció un bosquejo de los títulos publicados, esta vez de escritores de la zona oriental, que han abordado la poesía erótica y de amor.
En un recuento de nuestras tradiciones, el periodista Fernando Valdés Fré mostró una reseña sobre las fiestas dedicadas a la Virgen de la Candelaria en el poblado de Ceiba Mocha, que se remontan a la presencia canaria en ese territorio desde siglos atrás.
CMGW|Radio26| La Radio de tu corazón, desde Matanzas la Atenas de Cuba.