Trabajadores de la Empresa de Productos Lácteos de Matanzas laboran en la fabricación de líquidos con base de soya, como alternativa para garantizar la oferta de lácteos a personas favorecidas con dietas médicas.
«Nos encontramos inmersos en la preparación de leche de soya saborizada, esta vez con una nueva variante que es la cocoa, la que tiene mayor aceptación entre los consumidores. La capacidad de producción es de 25 a 30 toneladas», informó Marelys Bueno Hernández, jefa de Producción de la UEB Lácteos Matanzas.
El primer lote del producto fue comercializado de manera liberada en bodegas de los Consejos Populares de Pueblo Nuevo y Versalles, con el objetivo de medir la opinión del pueblo con respecto al lácteo.
«En estos momentos no podemos alcanzar el máximo nivel de producción debido al déficit de combustible diesel que necesitan las máquinas de elaboración. Hasta ahora contamos con todas las materias primas necesarias», añadió Bueno Hernández.
La leche de soja presenta un alto contenido de vitamina A y E, fitosteroles y polifenoles. Además aporta nutrientes, proteínas y elementos antioxidantes beneficiosos para el organismo, y constituye un alimento bajo en colesterol y calorías.
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