Para el retorno a la vida cotidiana sin temores de COVID-19 constituye premisa la vacunación de adolescentes y niños. En la provincia el proceso de inmunización en edades pediátricas avanza acorde a lo previsto. El doctor Arístides García Herrera secretario de la comisión provincial para la intervención sanitaria explica:
“Tenemos más de 100 mil escolares vacunados en el territorio. El grupo I (estudiantes en años terminales) ya concluyó con un 99.5%, solamente faltaron 4 de esas edades en toda la provincia. La vacunación del Grupo II (de 11 a 18 años) marcha también satisfactoriamente con 95.6 de la población inmunizada. Sin embargo resulta una preocupación de la Coordinación de vacunación que el Grupo III de dos a 11 años, el más sensible, todavía está a un 77 %.”
Pese a la inmunización 14 días después de la primera dosis, los padres y niños deben mantener las medidas de protección contra la COVID-19. García Herrera manifiesta que las hipótesis de la vacunación constituyen: evitar el fallecimiento, no desarrollar formas graves de la enfermedad y contribuir a una inmunidad colectiva tras la vacunación de más del 80% de la población
Los municipios de Matanzas, Cárdenas y Colón llevan la delantera en el proceso de vacunación mientras que Jagüey Grande y Jovellanos marcha con mayor lentitud. Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus resultan las vacunas aplicadas. Según García Herrera hasta la fecha no se han reportado reacciones adversas graves.
En cuanto a los menores de dos años explicó que los padres deben acudir al médico de la familia cuando el infante cumpla la edad establecida para administrarle la vacuna anticovid. En el caso de los niños que ya padecieron la COVID-19 aclaró que todavía los científicos trabajan en la creación de un candidato vacunal para que sus títulos de anticuerpos se eleven y reducir la posibilidad de desarrollar la enfermedad.
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