Juan Carlos el Guajiro

Degustar un delicioso jugo de caña en un pequeño trapiche artesanal, frutas tropicales maduradas en las matas, una taza de café elaborado a la usanza tradicional de los campos cubanos, todos a partir de métodos agroecológicos, distingue a la Finca, “El Guajiro”, perteneciente a la CCS José Martí del matancero municipio de Jagüey Grande, cuyo propietario es Juan Carlos Claro Alfonso.

De referencia nacional en la agroecología, este guajiro de avanzada sabe, utilizando sólo humus de lombriz y compost, lograr altas producciones de mamey colorado todo el año, que el limón se le dé, pese a ser una plantación devastada en Cuba y el mundo como consecuencia de la enfermedad de los “brotes amarillos o Huanglonbling”,que diversifica sus producciones pues además de mango, anón, guanábana, plátano fruta y vianda tiene sembrado caña, calabaza y yuca, entre otros.

Juan Carlos a “echado mano a los libros” y así conoce sobre suelo, variabilidad climática, momento óptimo para sembrar y es un estudioso para colocar en cada momento magia y saberes y seguir produciendo alimentos

Enclavada en la zona de San Isidro, antesala de la Ciénaga de Zapata, esta tierra es próspera gracias al esfuerzo de Juan Carlos y quiénes lo acompañan en la ardua tarea de hacer parir la tierra, con una concepción estrictamente ecológica.

Guajiro

La finca “El Guajiro” es muy visitada por cubanos y foráneos por reunir alta diversidad de animales (tiene un micro zoológico) y plantaciones diversas, es la tendencia del turismo rural que se hace visible aquí y muchos repiten la visita para admirar el exuberante paisaje, degustar café salido de las plantaciones, jugos de mango, guayaba, maracuyá o limón y si lo desea saborear un menú elaborado de la auténtica cocina cubana y también internacional.

Tomado del perfil de Facebook de Luis Rodriguez Ruballo 

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