Miembros de la Policía Federal de Brasil fueron atacados con fusiles y granadas este domingo, cuando cumplían la orden de captura contra el exdiputado Roberto Jefferson, aliado del presidente y candidato presidencial Jair Bolsonaro, en su domicilio en el estado de Río de Janeiro, en el sur del país.
“No me voy a entregar, porque me parece absurdo. Basta, ya me cansé de ser víctima de la arbitrariedad”, dijo el exdiputado en un video grabado por él mismo durante la operación policial.
Tras resistirse al arresto por horas, Jefferson terminó por entregarse.
Karina Oliveira, una agente de la policía, y el diputado Marcelo Vilella resultaron heridos después de que Jefferson lanzara granadas para evitar la captura.
El presidente Jair Bolsonaro le ordenó al ministro de Justicia, Anderson Torres, viajar a Río de Janeiro para poner fin a la crisis y aseguró que aquellos que dispararon contra la policía deberían ser arrestados.
En el ataque, Jefferson, exlíder del partido político Partido Brasileño del Trabajo (PTB), también disparó varios veces con un rifle y destrozó el parabrisas de un vehículo de la policía.
Jefferson había sido puesto bajo arresto domiciliario por insultar y amenazar a la presidenta del Tribunal Supremo brasileño, Cármen Lucía.
Pero el juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes, ordenó su captura después de que el político violara las condiciones del arresto domiciliario, que establecía que Jefferson no publicara nada en internet.
Sin embargo, el sábado grabó un video refiriéndose a la ministra como “Carmen Lucifer” y comparándola con “prostitutas”.
Bolsonaro, en medio de una campaña política en busca de reelección en la presidencia del país, repudió las declaraciones de Jefferson contra la ministra y criticó su respuesta armada contra los agentes de la policía.
El también candidato presidencial, Luiz Inácio Lula da Silva, declaró que la reacción de Jefferson “no es un comportamiento adecuado, no es un comportamiento normal”.
“Eso nunca sucedió en la política brasileña. Competimos tantas elecciones, nunca vimos tal aberración, tal ofensa, tal estupidez que este ciudadano, que es mi oponente, ha establecido en el país”, sostuvo el líder del Partido de los Trabajadores (PT).
A pocos días de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del próximo domingo entre Bolsonaro y el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, las tensiones políticas en Brasil siguen aumentando.
Lula es considerado como el favorito para ganar la contienda, pero el campo de Bolsonaro afirma que puede lograr la reelección.
(Tomado de BBC Mundo)
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